Ya estás lista para cubrir de betún tu pastel, pero ¿cómo te asegurarás de que te salga muy limpio y bien? Sigue leyendo y descubre nuestros tips para que tu embetunado quede súper perfecto.

Espátulas 

Los utensilios que utilizas para ponerle betún a tu pastel son muy importantes. Usar las herramientas correctas hará tu trabajo más fácil y rápido. 

Elige la espátula que más se te acomode a ti, el punto es que te sientas cómoda y puedas trabajar con tranquilidad. 

Una regla o algo para alisar 

Si no tienes un utensilio específico para alisar, tener una regla a la mano hará la gran diferencia. Después de poner y esparcir el betún con tu espátula, pasa la regla para terminar de alisar y también quitar el exceso. 

También te ayudará mucho tener una regla que sea del largo de tu pastel para que toda la orilla quede parejita. 

Te sugerimos utilizar materiales que no sean tan flexibles para que alisar sea más sencillo. 

Agrega betún a tu base 

Si te has preguntado cómo le hacen los pasteleros para embetunar sin que su pastel se esté moviendo, esta es tu respuesta. 

Agrega un poco de betún sobre tu base que puede ser de cartón o algún otro material que te ayudará a mover tu pastel con seguridad.

Capa de migas 

El secreto para un pastel embetunado súper lisito es siempre colocar la capa de migas. Este es un paso que no te puedes saltar. 

Embetuna todo tu pastel con una ligera capa de betún, no te preocupes si esparces algunas mijagas, el punto es que al cubrir tu pastel con la segunda capa de betún todas esas mijagas no se muevan y te quede lisito el acabado. 

Empieza por colocar el betún a los lados, asegurándote que quede nivelado y luego embetuna la parte de arriba.  

Después debes meter tu pastel al refrigerador por al menos una hora hasta que la consistencia esté perfecta. Sabrás que ya es tiempo si al tocar el betún con tu dedo nada se queda pegado. 

Arregla las imperfecciones 

Después de poner tu segunda capa de betún y alisar con tu regla o utensilio recto, puedes terminar de arreglar las pequeñas imperfecciones. 

Llena un vaso con agua tibia, mete tu espátula por unos segundos, sácala y sécala con una toalla o servilleta de papel y pásala por las partes que aún quieres alisar más. 

Puedes repetir este proceso cuantas veces creas que es necesario.

¡Listo! 

Ahora que conoces los mejores trucos para que tu embetunado se vea súper profesional es hora de ponerlos a la práctica. 

¿Cómo te quedó tu pastel? Nos encanta conocer cómo vas mejorando en tu técnica, etiquétanos en tus redes sociales.