Nos encantan los cheesecakes y sabemos que a veces es difícil conseguir la consistencia correcta, pero no te preocupes, en esta entrada te compartimos los secretos que hemos aprendido con los años para que te queden súper profesionales.

Ingredientes a temperatura ambiente 

Para que tu cheesecake tenga la consistencia y la textura cremosa que buscas, asegúrate que todos tus ingredientes estén a temperatura ambiente. 

Una media hora antes de comenzar a preparar tu pay saca las piezas de huevo del refrigerador junto con el queso crema y otros ingredientes que estén fríos.

Bate bien 

Evita que se formen grietas en tu cheesecake batiendo tu mezcla siempre a velocidad baja. Así evitarás introducir las burbujas de aire que suben durante la cocción y agrietan tu pay al enfriarse. 

También es importante que te asegures que no queden grumos en tu mezcla, ya que estos no se desharán durante la cocción. 

Otro tip muy importante es que agregues las piezas de huevo hasta el final, ya que al batirlas agregan más aire. Así que agrégalas al último y solo bate hasta que estén incorporadas.

Inténtalo a Baño María 

Puedes hornear tu cheesecake al Baño María para ayudar a que se cocine de manera uniforme. Para hacerlo, debes de colocar un molde más amplio debajo de tu cheesecake y agregar agua ya hirviendo hasta la mitad de altura de tu cheesecake.  

Evita que le entre agua a tu cheesecake al envolver el molde con papel aluminio antes de ponerlo dentro del molde con agua hirviendo.

Acabado perfecto 

Cuando termine el tiempo de cocimiento, saca tu cheesecake del horno y pasa un cuchillo mojado con agua caliente por toda la orilla. 

Hacer esto ayudará a que no se deforme tu cheesecake cuando se está enfriando y encogiendo. 

Regresa tu cheesecake al horno apagado y deja la puerta entreabierta para que se enfríe lentamente. Cuando esté más frío puedes sacarlo y meterlo al refrigerador. 

¡Hora de hornear! 

Ya que tienes los mejores tips para que tu cheesecake luzca y sepa increíble, es hora de poner tus conocimientos en práctica. DESCARGA AQUÍ nuestros tips resumidos para que siempre los tengas a la mano. 

Y un último tip: El cheesecake sabe mejor el día después de haberse cocido, así que puedes ser paciente y esperar a saborear la gran diferencia hasta el día siguiente. 

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