Tener a los pequeños en casa puede ser una gran oportunidad para que echen a volar su imaginación al incluirlos en nuestras actividades del día, como la cocina, creando recetas únicas y pasar momentos de mucha diversión. 

Existen infinidad de beneficios al invitarlos a cocinar contigo, ya que no solo los mantendrás entretenidos un rato, sino que además les darás la oportunidad de: 

Desarrollar su creatividad

Cocinar les ayuda a expresarse por sí mismos, explorando colores, texturas y sabores que activarán su cerebro. Además de que les ayudará mejorar su autoestima y confianza.

Opinar y sugerir ideas

Ser escuchados y que sepan razonar y cuestionar, los orilla a explorar el mundo que los rodea, para obtener soluciones y aprendan a conocerse a sí mismos.

Experimentar con sabores, olores y texturas

Conocerán ingredientes, frutas y verduras, familiarizándose y perdiendo el miedo o asco por su sabor, muchas veces por su apariencia o el olor. Es buen momento para hacer que los pequeños consuman comida saludable de manera divertida.

Trabajar en equipo

Cocinar en compañía y dividir las tareas les enseñará a respetar el trabajo propio y de los demás dándose cuenta de que las personas pueden pensar de otra manera y cómo se puede llegar a un acuerdo en el que ambas partes estén satisfechas. 

Reforzar la relación padres-hijos

Aprovechar cada minuto en el que se pueda realizar una actividad para entrelazar mejor las relaciones con los pequeños tendrá como resultado muchas anécdotas que contar y momentos inolvidables. 

¡Ahora ya lo sabes! El tiempo invertido en casa enseñándole a los más pequeños el amor por la cocina, es una de las más lindas experiencias que quedará en sus recuerdos.

Te compartimos algunas recetas sencillas y divertidas que puedes preparar con Vainilla Molina y tus peques.

Tacos dulces de helado

Gelatina de mosaico

Galleta de chocolate

Waffles de colores

Cake pops en forma de helado