Habrá veces en los que no tengamos disponible algún objeto especial para repostería. ¡Pero que no cunda el pánico! A continuación, te describimos algunos utensilios básicos de tu cocina que puedes usar como alternativa.

Hilo o cordón: SI no cuentas con el cuchillo perfecto para cortar los sobrantes de tus pasteles, puedes emplear un pedazo de hilo o cordón, estirarlo y pasarlo por el pedazo que quieres cortar. Tendrás un corte limpio sin necesidad de invertir en ese momento en un cuchillo nuevo.

Globos: Cuando quieres hacer bases de chocolate para presentar ahí un helado o dulces, no te limites si no tienes un molde especial. Infla un globo, cúbrelo con chocolate derretido, mete al congelador por un par de horas y, cuando esté duro, truena el globo y tendrás ahora tu base de chocolate para poner lo que quieras.

Botella o latas: El truco más fácil para reemplazar un rodillo es usar una botella de plástico o de vidrio y/o una lata, para poder estirar la masa sin problema. Eso sí, desinféctalo antes de usar para no contaminar tu postre.

Secadora de cabello: Este objeto nos ayudará a darle a nuestros pasteles decorados con cremas de mantequilla o chocolate el brillo suficiente con una simple pasada. Prende la secadora y a potencia baja, pásala por encima del pastel hasta que la crema se empiece a derretir muy ligeramente. Al enfriarse, adquirirá un tono brillante.

Mousepad: El mousepad, siempre y cuando no sea de plástico, también nos sirve como base para evitar que tus recipientes calientes hagan estragos en tu mesa.

Bolsas de plástico: A falta de manga pastelera, una bolsa de plástico resistente siempre te va a sacar de apuros. Tómala como si fueras a cerrarla, llénala de la mezcla que vayas a utilizar, aprieta para evitar derrames y, con unas tijeras, haz un corte al final más estrecho de esta para hacer la punta. Tendrás una manga pastelera en minutos.

Ahora sí, estás lista para utilizar estos hacks en tu cocina.